¡Tensión al máximo en La Promesa! El próximo capítulo viene cargado de emoción, valentía y una confrontación que podría cambiar el destino de todos. Simona, una simple cocinera, se convierte en la heroína inesperada al enfrentarse cara a cara con la cruel Leocadia y el manipulador Lorenzo, destapando una verdad que nadie se atrevía a ver: la pequeña Rafaela está enferma por culpa de ellos.
Todo comienza cuando Simona, reprendida sin piedad por haber sugerido la ayuda del Dr. Guillén, es humillada brutalmente por Leocadia y Lorenzo. Pero lo que ellos no imaginan es que esa humillación será la chispa que encienda una rebelión silenciosa. Simona, dolida pero decidida, jura no quedarse de brazos cruzados mientras una inocente bebé se apaga lentamente. Y es así como, impulsada por su sentido de justicia, empieza a investigar por su cuenta… y descubre algo aterrador.
El Dr. Guillén ha desaparecido sin dejar rastro tras visitar el palacio. Catalina, desesperada, confirma que ni siquiera se despidió. Simona no duda: alguien lo obligó a marcharse. ¿Quién? Todo apunta a los mismos de siempre: Leocadia y Lorenzo. No soportan su origen humilde, no toleran su presencia. Lo querían fuera. Pero sus prejuicios pueden costar una vida. Esta vez, el precio del clasismo podría ser fatal.
Simona, armada solo con su valor, irrumpe en la habitación de Leocadia. La tensión se corta en el aire. La acusa directamente de haber saboteado al médico. Leocadia intenta imponer su poder, incluso amenaza con abofetearla… pero Simona no se rinde. Le sostiene la mirada y declara: “No permitiré que una niña inocente muera por su desprecio.”
En paralelo, Catalina lucha contra el tiempo. Su hija no mejora. Médicos prestigiosos han fallado. Las plegarias se agotan. Solo queda una posibilidad: aceptar la propuesta de Simona y recurrir a una curandera de campo, una mujer sin títulos pero con experiencia de generaciones. Catalina, con el corazón en mil pedazos, accede.
Pero lo más impactante aún está por venir.
Simona, con astucia, prepara una trampa. Sirve a Leocadia con aparente sumisión, provocándola sutilmente. Y cae en la trampa: Leocadia deja escapar palabras escalofriantes. Habla de Rafaela como si fuera un estorbo, un problema que desaparecer resolvería muchas cosas. Justo en ese momento, Alonso entra. Y escucha todo.
La expresión del marqués cambia de inmediato. El aire se congela. Su nieta, considerada una molestia por quienes debían protegerla. Leocadia queda expuesta, su máscara destrozada. El escándalo es inevitable. Simona se convierte en la voz de la verdad, la voz de los olvidados. Ya nada será igual en el palacio.
¿Castigará Alonso a Leocadia? ¿Logrará Simona salvar a la pequeña Rafaela a tiempo? ¿Y qué otros secretos oscuros están a punto de salir a la luz?
Una cosa es segura: el próximo episodio marcará un antes y un después.
¡No te lo pierdas por nada del mundo!