Fina se encuentra fuera de la habitación, notando que la puerta está sin seguro. Con cautela, decide entrar y llamar, pero pronto descubre que no está sola. Santiago aparece repentinamente, revelando que lleva tiempo esperando su visita. Con un tono sarcástico y amenazante, le dice que, a diferencia de ella, él ya la conoce muy bien.

Cuando Fina intenta escapar, Santiago bloquea rápidamente la puerta y le exige saber a dónde cree que va. Fina, visiblemente alarmada, le pregunta por qué está allí y cómo es que ha logrado escapar de la cárcel. Santiago, con una sonrisa irónica, le responde que obtuvo un permiso temporal para asistir al funeral de su abuela, y revela que fue el único que cuidó de ella mientras estaba en prisión. Expone su dolor al decir que su abuela murió sola y abandonada debido a su encarcelamiento.

La culpabilidad de Pelayo Olivares

Santiago no duda en culpar a Pelayo Olivares, el hombre que se casó con Marta, por haber arruinado su vida. Santiago insinúa que el matrimonio entre Pelayo y Marta fue una fachada para ocultar algo vergonzoso y lo utiliza para justificar su odio hacia ambos. Su conversación toma un giro aún más oscuro cuando Santiago comienza a hablar de venganza, diciendo que no le importa lo que pase con él, ya que planea hacer que todos paguen por lo que le hicieron.

Las amenazas de Santiago

A lo largo de la conversación, Fina se muestra asustada y le pide a Santiago que no haga nada, especialmente por la llegada de Marta. Pero Santiago es inflexible y le advierte que no va a permitir que nadie se le interponga, amenazando con hacerle pagar. Fina le ruega que se vaya y le promete que no dirá nada de su encuentro, pero Santiago ignora sus súplicas y le da una última amenaza mortal: si se mueve un solo milímetro, será lo último que haga.

El destino de Fina y Marta

Finalmente, Santiago se burla de Fina, mencionando que su “ángel de la guarda”, Marta, parece llegar tarde. A pesar de sus amenazas, Santiago se equivoca al creer que está en control, pues Fina está decidida a no ceder ante sus chantajes. En su mente, está claro que Marta y ella están destinadas a estar juntas para siempre, sin importar lo que Santiago planee. Aunque él cree que tiene todo bajo control, el amor entre Marta y Fina es más fuerte que cualquier amenaza que pueda hacerle.

Conclusión:
Este capítulo de Sueños de Libertad es una muestra de lo crudo que puede ser el enfrentamiento con los fantasmas del pasado y las consecuencias de las decisiones de los personajes. Santiago parece estar decidido a arrastrar a Fina consigo, mientras Fina se enfrenta a su propia lucha por la supervivencia. El capítulo no solo pone a prueba la resistencia de los personajes, sino que también nos deja con la sensación de que el destino de Marta y Fina está inevitablemente entrelazado.