Tras semanas de programación inestable por el Tour de Francia, La Promesa vuelve a su horario habitual en TVE… y lo hace con una tormenta de secretos, amenazas y traiciones. La ficción de época no da tregua, y esta semana llega cargada de giros impactantes que no dejarán a nadie indiferente.
Todo comienza con un inquietante paquete que recibe Alonso. No es un simple envío, sino un encargo de Cruz realizado tiempo atrás, cuando aún tenía influencia y poder en la Corte. Lo que contiene es un retrato al óleo, firmado por un renombrado pintor de la realeza. Pero lejos de ser un regalo inofensivo, ese cuadro esconde un mensaje oculto, un símbolo, una advertencia. La sombra de Cruz, a pesar de su ausencia, vuelve a oscurecer los pasillos del palacio.
Para Alonso, esta entrega es más que un recuerdo: es una advertencia. Para Catalina, una provocación. Y para quienes conocieron de cerca a Jana y su trágico final, un posible indicio. ¿Podría estar el retrato conectado con su asesinato?
Mientras el misterio del cuadro se apodera de los pensamientos de la familia Luján, las tensiones internas escalan peligrosamente. Catalina y Martina ya no esconden su enemistad. El tono sube, las palabras duelen, y la amenaza de Catalina de abandonar La Promesa con sus hijos no es solo un impulso: es una declaración de guerra.
Esta amenaza no solo afecta a Martina, sino que sacude profundamente a Alonso, que no puede permitirse otra pérdida. Pero el golpe más inesperado viene de Adriano, que, silencioso hasta ahora, parece estar preparado para tomar partido. ¿Romperá con su madre? ¿Se convertirá en aliado de Catalina?
En paralelo, en el servicio, Cristóbal impone su tiranía sin piedad. El nuevo mayordomo, con su frialdad característica, decide degradar a Lope a simple lacayo. La humillación es pública y cruel. El joven, que ya había demostrado su valor y compromiso, queda reducido a una sombra. Pero los pasillos de la cocina arden de indignación. Simona, Candela, Catalina… todos parecen dispuestos a rebelarse. Porque en La Promesa, la injusticia no pasa desapercibida.
Y mientras los secretos hierven en silencio, Curro y Ángela siguen cavando en las sombras del pasado. La verdad sobre la muerte de Jana ya no parece tan lejana. Documentos ocultos han salido a la luz, y el nombre que más destaca entre los sospechosos es el del Capitán de la Mata. Un hombre con un historial oscuro, implicado en negocios turbios y con motivos de sobra para silenciar a quien pudiera descubrirlo.
La investigación avanza, pero también se vuelve más peligrosa. Si el Capitán está detrás del crimen, no dudará en volver a matar para protegerse. Curro lo sabe, pero no se detendrá.
En medio de todo este clima cargado, hay un rincón donde todavía germina la ternura: Toño y Enora. Esta semana, los veremos dar sus primeros pasos como pareja: algunas salidas, un malentendido divertido y una chispa que, quizás, se transforme en llama. En un mundo donde todo parece derrumbarse, ellos representan la posibilidad de un nuevo comienzo.
La Promesa sigue jugando con la luz y la oscuridad, el amor y el odio, la verdad y las máscaras. Y esta semana, cada personaje tendrá que elegir de qué lado está. Porque en Luján, cada gesto puede ser un error… o una sentencia.